Durante el verano de 2024, durante una cerveza con mi amiga Rocío, le propuse hacer unas colchas para sus hijas. Aceptó. Pero quería que las colchas tuvieran los colores que a cada una le gusta y que se las diese a la vez.
Me dio las telas que quería que se usaran y le propuse el patrón de la colcha de Lucía Cordero.
Realmente fueron muy rápidas de hacer y prácticamente en un par de meses mal contados se pudieron entregar.